martes, 29 de diciembre de 2009

LLEGADOS DE LA ISLA DE LA PALMA

Nuestro amigo Alexis H. y su prima Tania L. desde la vecina isla de la Palma nos relatan su reciente e insólita experiencia en la que fue su primera visita al barranco.






Yo y mi prima Tania L. llegamos desde La Palma con la intención de conocer el Barranco de Badajoz. Llegamos al barranco aproximadamente a las seis de la tarde y según íbamos caminado nos hicimos algunas fotos dado que al ser un lugar tan llamativamente hermoso valía la pena inmortalizar las vistas y el paisaje. El primer sitio que visitamos en el barranco fue por donde está ubicada la galería de Aceviñó y nos quedamos un ratito en el lugar, pasados unos minutos nos fuimos más arriba y continuamos el camino llegando hasta los primeros cuartos donde se encontraban maquinarias que en su tiempo se usarían para el trabajo en las galerías. Subiendo una pequeña loma encontramos un camino que nos llevó hasta el “final” del barranco donde se encuentra la galería de Izaña y en donde nos sentamos para descansar y comer. Pasado un rato el tiempo se nos echaba encima y debíamos regresar, fuimos bajando pero la noche se nos echó encima. Habíamos llevado dos velas que encendimos para iluminarnos en el camino. En ese momento avisté en el cielo una luz intensa volando a gran velocidad, iba tan rápido que solo la pude ver yo en ese momento, pero a los pocos minutos apareció otra siguiendo el mismo rumbo que la anterior y que esta vez sí pudimos ver yo y mi prima a la vez. Dada la velocidad y la intensidad de ese tipo luz, blanca y brillante descartamos que fuera algún tipo de avión. Continuamos la marcha y justo cuando llegamos al final del recorrido volvimos a ver otra luz idéntica cruzando el cielo barranco. En ese momento también tuvimos la suerte de descubrir a unas curiosas aves, las pardelas que pueblan el barranco y que de noche gritan un curioso canto y lanzan piedritas a su paso. Según avanzábamos nos gritaban y cuando nos parábamos se callaban y permanecían en silencio, nos dio la sensación de cómo si no quisieran que nos marcháramos del lugar. Fue en esta nuestra primera visita una experiencia maravillosa que espero repetir pronto.

Alexis H.

domingo, 27 de diciembre de 2009

NUEVAS GALERÍAS AL DESCUBIERTO




Recientemente hemos descubierto una nueva galería en las faldas de las montañas del barranco de Badajoz, prácticamnete invisible a la vista, la hemos localizado y explorado gracias al fruto de la casualidad y a las inclemencias del tiempo sobre el lugar en estos días, quedando al descubierto una nueva entrada no  muy lejos de la ya conocida galería del Socorrito. Esta galería parece ser una prospección antigua inacabada o abandonada voluntariamente por algún motivo por los trabajadores de la época, aunque no podemos confirmar nada. La galería se encuentra a distinto nivell del suelo teniendo que subir primero una pequeña loma para luego bajar hacia su interior, donde a primera vista vemos una entrada abobedada de  unos cuatro metros no labrada, natural, ya seguida por una cavidad subterránea de casi dos metros de alto ya labrados hasta el final. La galería no es muy profunda y es de fácil recorrido, no llega a los doscientos metros de profundidad,el aire es respirable pero advertimos que en una parte de la misma el techo no se ve estable, debido a las crecientes filtraciones y la humedad las piedras no están sólidas, por lo que advertimos de su peligro a futuros aventureros. Esta galería llevaba mucho tiempo oculta a la vista de las personas dado que por lo que pudimos ver en su interior no había restos de papeles, comida o bolsas de los inconscientes que suben al lugar y no se preocupan de preservar nuestro enclave. Así mismo pudimos ver al final de la misma las marcas, arañazos suponemos de la máquina perforadora asi como agujeros que suponemos que son para introducir las cargas para las voladuras. Tambien mucho mas arriba a poco menos de cien metros encontramos otra muy similar pero cuya entrada esta derrumbada y para acceder a ella hay que entrar reptando. sin duda el barranco sigue teniendo cosas interesantes que mostrarnos.